PREVENCIÓN

Entendemos por prevención al conjunto de acciones y medios -actos técnicos, educativos y sanitarios, medidas legales, ingeniería sanitaria, etc.- que tienen como objetivo la promoción protección y recuperación de la salud individual y colectiva. Prevenir es preparar y disponer con anticipación lo necesario para evitar un riesgo: esta es la acción más importante a desarrollar, ya sea mediante campañas destinadas a concientizar a la comunidad, o con la implementación de medidas activas y pasivas para disminuir los efectos de los traumatismos.

 

Los niveles de prevención

La prevención primaria se ocupa de evitar la producción del traumatismo, trabajando sobre el ambiente, las conductas individuales, los aspectos socioculturales y las reglamentaciones legales (diseño adecuado de vehículos, mantenimiento de rutas y caminos, áreas recreativas seguras para niños, etc.).

La prevención secundaria consiste en asegurar que durante la ocurrencia de la lesión la persona tenga la protección necesaria y adecuada para disminuir y mitigar las consecuencias (uso de cinturón de seguridad, casco, detectores de humo, cortacorrientes, etc.).

La prevención terciaria consiste en lograr que la persona lesionada sea atendida de manera eficiente y eficaz para permitir la máxima sobrevida con el mínimo de secuelas posibles permitiendo su reinserción social y laboral.

Notas: [1] Modificado de Bosque, L.; Neira, J. Prevención de Lesiones en Prioridades en Trauma. Editorial Panamericana.